• Para iniciarte puedes contratar un
especialista en Pilates que te guíe en los entrenamientos, concurrir a un
gimnasio especializado en el método o simplemente comprar un libro que describa
la práctica del Pilates paso a paso.
• Empieza siempre por el nivel más básico.
Progresa solamente cuando puedas hacer este nivel correctamente sin
"luchar". Respira siempre inhalando el aire por la nariz y
exhalándolo por la boca. Expulsa el aire en el esfuerzo máximo. No contengas
nunca la respiración.
• Más que ejercicios, el Pilates es una serie
de movimientos. No pienses como en la gimnasia tradicional en acabar las
repeticiones. Concéntrate en la manera en que estás haciendo cada movimiento.
El camino es tan importante como la meta. Haz cada movimiento unas 10 veces sin
pausas. Lleva a cabo la sesión con una música suave que consiga relajarte.
• Comienza la sesión con unos movimientos
grandes y suaves para calentar el cuerpo (abre y cierra los brazos, camina en
el lugar, flexiona las rodillas, etc.). Si percibes cualquier dolor en la
espalda o en algún otro sitio, vuelve a un nivel inferior del ejercicio.
Recuerda que el dolor es síntoma de que algo va mal.
• Practica el método Pilates al menos 3 veces
por semana durante unos 45 minutos por sesión. Al cabo de un mes, habrás
mejorado notablemente la postura y la fuerza de todo el cuerpo. Complementa el
entrenamiento con actividades aeróbicas como caminar, andar en bicicleta,
trotar, nadar, etc.
Cómo evitar malas posturas
Cada paso que damos, cada caja que
levantamos y cada movimiento que hacemos deben estar coordinados por los
abdominales y por la espalda para proteger la columna vertebral de cualquier
lesión. Por muy fuertes que sean tus brazos, si tu torso no tiene la
estabilidad suficiente, tu fuerza se verá limitada. Por eso el método Pilates
es tan importante para corregir las malas posturas, porque fortalece
principalmente la estabilidad del torso y potencia la fuerza general del
cuerpo. Pero por qué dejar que el cuerpo se lesione si puedes evitarlo; tan
sólo es necesario modificar algunos malos hábitos que inciden directamente en
la postura.
Lo primero de todo es que ambos lados del cuerpo sean simétricos, igual de fuertes y flexibles. Hombros, caderas, tobillos y omóplatos deben estar paralelos y simétricos. Realiza una prueba de la posición: Colócate frente a un espejo dónde puedas verte de cuerpo entero. En principio adopta tu postura de siempre y luego ajusta la posición de todo el cuerpo hacia una "postura correcta". Para ello supervisa los siguientes puntos:
1. Hombros a la misma altura y paralelos al suelo.
2. Caderas simétricas y niveladas.
3. Las palmas de las manos mirando hacia atrás.
4. Rodillas juntas, simétricas y mirando hacia adelante.
5. Tobillos juntos.
6. El peso del cuerpo debe estar igual repartido en cada pierna.
Esa postura erguida y alineada es la que deberás adoptar poco a poco hasta que el cuerpo la memorice y automatice como antes lo hacías con tu anterior postura.
Lo primero de todo es que ambos lados del cuerpo sean simétricos, igual de fuertes y flexibles. Hombros, caderas, tobillos y omóplatos deben estar paralelos y simétricos. Realiza una prueba de la posición: Colócate frente a un espejo dónde puedas verte de cuerpo entero. En principio adopta tu postura de siempre y luego ajusta la posición de todo el cuerpo hacia una "postura correcta". Para ello supervisa los siguientes puntos:
1. Hombros a la misma altura y paralelos al suelo.
2. Caderas simétricas y niveladas.
3. Las palmas de las manos mirando hacia atrás.
4. Rodillas juntas, simétricas y mirando hacia adelante.
5. Tobillos juntos.
6. El peso del cuerpo debe estar igual repartido en cada pierna.
Esa postura erguida y alineada es la que deberás adoptar poco a poco hasta que el cuerpo la memorice y automatice como antes lo hacías con tu anterior postura.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario