martes, 3 de diciembre de 2013

Alimentos sanos que benefician el cuerpo




Como existen alimentos con un alto contenido de purinas (las sustancias que promueven el nivel de ácido úrico en sangre), también existen los que están libres de ellas. Y precisamente esta clase de alimentos son los que se deben incluir en una dieta si se desea controlar el exceso de ácido úrico. Entre los principales grupos encontramos los siguientes:

• Frutas y vegetales: A excepción de la espinaca, las setas (hongos), los espárragos, lentejas y habas, todas las frutas y verduras son beneficiosas para el organismo. No sólo que están libres de purinas, sino que le proveen al cuerpo una importante cantidad y variedad de vitaminas y minerales, esenciales para las funciones más vitales de todos nuestros órganos.
• Pastas y cereales integrales: Tanto las simples como las rellenas, las pastas son alimentos sumamente nutritivos. Lo ideal son los rellenos de verdura y ricota y deben evitarse aquellos con carne, pollo o sesos. Asimismo, los cereales integrales como el arroz, la avena, la cebada y el trigo son los hidratos de carbono por excelencia, que no deben faltar en ninguna mesa.
• Las mantecas y margarinas livianas pueden consumirse con discreción, mientras que los condimentos como los aceites vegetales (oliva, maíz, girasol o uvas), el vinagre, el aceto balsámico y el jugo de limón puede utilizarse en las preparaciones sin ningún problema.
• Los dulces naturales como la miel o melaza, el arrope, los edulcorantes sin aspartamo, las gelatinas livianas, los yogures descremados y los postres dietéticos pueden incluirse normalmente en la dieta diaria. Eso sí, siempre se deben evitar los excesos, sobre todo en este tipo de alimentos. También los quesos blancos y descremados están permitidos.
• Las infusiones o tisanas de manzanilla, boldo, tilo o menta son excelentes depurativos naturales que permiten eliminar las toxinas del organismo. El agua natural o mineral también puede consumirse con entera libertad. 

Las cerezas y su poder preventivo

Las variedades comestibles de cerezas, crudas, son una importante fuente de potasio, el cual ayuda a estabilizar el ritmo cardíaco y a mantener sana la piel. También contienen considerables cantidades de vitamina C.
Desde hace mucho tiempo, las cerezas han sido apreciadas por la medicina naturista por sus características “depurativas”. Se considera que esta fruta elimina toxinas y líquidos, y que limpia los riñones. Su suave efecto laxante ayuda a combatir el estreñimiento. Además, el consumo diario de 15 a 25 cerezas (unos 225 gramos), ya sean frescas o enlatadas, contribuye a reducir los niveles sanguíneos de ácido úrico, lo que podría evitar la gota. Por eso es imprescindible incluirlas en cualquier dieta para combatir la hiperuricemia.

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