El dolor de espalda
se origina generalmente por lesiones y malas posturas corporales, y suele
localizarse en la zona lumbar a la altura de la cintura. Este dolor es muy
molesto aunque en la mayoría de los casos nunca se prolonga más de una o dos
semanas. Si la molestia persiste en el tiempo es inevitable la consulta al
médico, ya que puede revelar un problema más grave.
Por otra parte,
aunque el denominado “dolor de cintura” suele tener un origen fisiológico, no
deben descartarse otras causas de origen psicológico como la acumulación de
estrés, la ansiedad y la tensión muscular. Asimismo, el dolor de espalda
recurrente o crónico se debe sobre todo a malas posturas que adopta el cuerpo
cuando permanece parado, sentado o acostado. En estos casos el mejor remedio
consiste en adoptar posturas adecuadas que promuevan la salud de la espalda y
la columna vertebral.
Cuando la molestia
aparece pueden llevarse a cabo determinados ejercicios correctivos que han sido
especialmente concebidos para aliviar el dolor agudo de espalda, sobre todo
cuando se presenta en la zona de la cintura. La clave está en practicar los
ejercicios con regularidad antes de que el problema se agudice, quizá uno o dos
días después del comienzo del dolor. La rutina consiste en repetir los primeros
tres ejercicios cada tres o cuatro horas hasta que el dolor disminuya, y luego
realizar el último ejercicio para evitar que reaparezca.
Precauciones: No haga los ejercicios si no puede enderezar
el cuerpo por completo o el dolor se incrementa cuando está de pie o caminando.
En este caso es mejor que haga reposo acostada y acuda al médico en cuanto
pueda. También si el dolor empeora o se extiende a otras partes del cuerpo
mientras hace los ejercicios, debe dejarlos de inmediato y consultar al médico.
Ejercicio 1:
Acostada boca abajo sobre una colchoneta ligera, con los brazos pegados al
cuerpo y la cabeza hacia un lado. Respire en forma profunda y luego relájese 4
o 5 minutos. Puede alternarse la posición de la cabeza repartiendo el tiempo en
forma equitativa: 2 minutos con la cabeza hacia la derecha y dos minutos con la
cabeza hacia la izquierda.
Ejercicio 2:
Recostada boca abajo, apoye los codos y los antebrazos en el suelo, respire en
forma profunda y luego afloje gradualmente los músculos de la parte baja de la
espalda. Permanezca unos cinco minutos en esta posición.
Ejercicio 3: Apoye
el cuerpo boca abajo en el suelo sosteniéndose con las manos. Extienda los
brazos y levante el torso hasta arquear la espalda. Permanezca en esa posición
un par de segundos y luego repita nueve veces más el ejercicio, tratando de
arquear un poco más la espalda con cada movimiento pero siempre de forma
natural y sin forzar.
Ejercicio 4:
Parada, con las piernas ligeramente separadas entre sí, apoye las manos en la
parte baja de la espalda (cintura) al tiempo que echa el cuerpo hacia atrás lo
más que pueda sin doblar las rodillas. Conserve la posición unos segundos y luego
enderece el tronco. Repita nueve veces más tratando de inclinar un poco más la
el torso con cada movimiento, pero sin perder el equilibrio. Por tratarse de un
ejercicio preventivo puede realizarlo varias veces al día, sobre todo si
trabaja sentada.
Medidas
preventivas
Si se presta especial atención a determinados movimientos y actividades cotidianas, es posible corregir aquellas posturas corporales que atentan contra la salud de la espalda y la cintura. Para ello deben seguirse los pasos necesarios involucrados en cada situación particular:
Al levantarse de un sillón:
Acercar los pies al frente del sillín hasta tocar a base del mismo, separando ligeramente las rodillas para no perder el equilibrio.
Enderezar la espalda y colocar las manos en los brazos del sillón. Estirar poco a poco las piernas y levantarse del sillón con la ayuda de los brazos pero sin encorvar la columna.
Al sentarse en una silla:
Colocarse de espaldas a la silla, con los pies separados a la distancia de los hombros ubicando los talones frente a la misma. Enderezar la espalda y bajar lentamente flexionando las rodillas inclinando el torso hacia delante pero sin encorvar la columna.
Al vestirse:
Evitar sentarse o agacharse para ponerse la ropa, sobre todo si el dolor de cintura ya se ha instalado. Lo primero que debe hacerse es arremangar las prendas para pasar los brazos y las piernas sin problema.
Para ponerse los pantalones conviene hacerlo con el cuerpo acostado boca arriba. Levantar las rodillas para meter los pies en los pantalones y luego enderezar las piernas para que la prenda suba hasta la cintura. Es importante no arquear la espalda durante todo el movimiento.
Al levantarse de la cama:
Juntar las rodillas, alzar las piernas y girar el cuerpo hacia el costado de salida. Bajar lentamente los pies y ayudarse con los brazos hasta sentarse en la cama. Al acostarse, invertir el procedimiento.
Me parece muy importante el artículo.
ResponderBorrarUno de los motivos del dolor de cintura es permanecer muchas horas sentados (por trabajo o viajes prolongados).
En Argentina existe una indumentaria innovadora para prevenir contracturas en cuello y cintura; se trata de un chaleco de vestir que incluye almohadillas removibles para cervicales y lumbares y contribuye a adoptar una postura correcta en cualquier tipo de asiento, lo que previene la contractura.
Es muy lindo, cómodo y práctico. Se llama Chaleco Noaj y su página web es www.chaleconoaj.com.ar
Gracias por los consejos.
Saludos
Aída