En mayor o menor cantidad todos tenemos glándulas sudoríparas. Ellas constituyen un mecanismo totalmente normal en cada organismo a través del cual se mantiene la temperatura corporal. El sudor es el líquido producido en la piel por actividad de las glándulas sudoríparas (encargadas de la termorregulación). Cada glándula se compone de un conducto que se abre en un poro libre e invisible y de un pelotón secretor situado en la profundidad de la dermis.
Las glándulas pueden ser apócrimas o écrimas. Las "apócrimas" (sexuales) aparecen en la pubertad y se concentran en las zonas con vello. Este es el tipo de sudoración que genera olor fuerte y por momentos hasta desagradable. El olor no proviene del cuerpo, sino que al ponerse en contacto el "líquido graso" con las bacterias, genera esa transformación.
En cambio, las "écrimas" aparecen en la infancia y las encontramos en las zonas sin pelos, como pueden ser las plantas de los pies o la palma de las manos. Estas últimas permanecen durante toda la vida.
Síntomas de alerta en sudoración excesiva
- Eczema.
- Aumento del sudor expandiéndose a todas las zonas.
- Piel seca.
- Aparición de vesículas rojas sobre la piel.
- Axilas con placas pardas.
- Picazón.
- Fisuras en los pies.
La sudoración normal es producto de una elevación térmica (calor) acompañada de una dilatación de los vasos sanguíneos, pero si sucede en momentos de reposo ya el mecanismo se ve afectado.
Hoy en día es muy común que ciertas personas acudan a un especialista con la preocupación de no saber que hacer con el exceso de sudor. Este exceso puede ser la consecuencia de ciertas dolencias (hormonal) que se manifiestan de esta manera, o producto de un pico de estrés que se percibe en ocasiones con sudor en la palma de la mano, manchas en la ropa u olor fuerte.
Consejos útiles para el exceso de sudor
- Utilizar jabones buenos de acción antiséptica.
- Depilarse con frecuencia.
- Limpiar bien la piel antes de aplicar desodorante.
- En caso de personas alérgicas, prestar atención al producto que deben usar.
- Utilizar prendas confeccionadas con telas de algodón, microfibras (algunas) o lino.
- Limpiar con toalla o cualquier elemento que absorba la sudoración durante la actividad física.
- Utilizar absorbentes de olor y antitranspirantes de buena calidad.
- No compartir los desodorantes a bolilla o en barra ya que pueden producirse algún contagio.
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