martes, 13 de mayo de 2014

La importancia de la "Fecha de Caducidad"



“La «fecha de caducidad» de un alimento indica el día límite para su óptimo consumo desde el punto de vista sanitario. Es la fecha a partir de la cual, según el fabricante, el producto ya no es seguro para la salud del consumidor.”

También se la denomina fecha de vencimiento o fecha límite de utilización o fecha límite de consumo recomendada. A través de ella se puede conocer la vida útil de un alimento, especialmente de los perecederos como los alimentos crudos (carne y pescado frescos), huevos, productos lácteos, ensaladas, envasados y enlatados  —en los que es muy recomendable ajustarse a la fecha y consumirlos lo antes posible, para evitar intoxicaciones—.

En los alimentos y bebidas, además, se puede diferenciar la “fecha de consumo preferente” o “fecha de duración mínima”, que —a diferencia de la fecha de caducidad— es el tiempo durante el que esos productos conservan correctamente sus cualidades sensoriales. Es la fecha indicada por el fabricante sobre el tiempo que el alimento mantiene intactas sus propiedades organolépticas (olor, sabor, textura, consistencia) sin que su ingesta posterior suponga un riesgo para la salud. Se utiliza en los productos alimenticios que pueden conservarse más tiempo (como los cereales, el arroz o las especias). No es peligroso comer estos productos después de esa fecha, pero pueden haber empezado a perder su aroma y su textura.

Las regulaciones sobre la fecha de caducidad o vencimiento varían de acuerdo a cada país. Aunque es posible que esta fecha no se encuentre especificada en los siguientes alimentos:
• Frutas, hortalizas y patatas frescas (salvo las semillas o los brotes de leguminosas, que sí deben llevar fecha en su envase).
• Todo tipo de vinos y vinagres.
• Bebidas alcohólicas con una graduación superior al 10%.
• Productos de panadería y pastelería a consumir en el día de su fabricación.
• Sal de cocina (o sal de mesa).
• Los azúcares en estado sólido.
• Productos de confitería elaborados principalmente con azúcar o gomas de mascar (chicles).

En realidad las fechas de caducidad o vencimiento hablan más de la calidad del producto que de su seguridad para ingerirlos. Los consumidores pueden verse alentados a desechar productos que están todavía aptos para el consumo. Si bien hay productos más sensibles a descomposición o toxicidad luego de vencida la fecha para su consumo, como por ejemplo: leche, quesos blandos, yogur, huevos, pescados, carne roja y carne de aves. En ellos quizá deba considerarse más que en otros productos, la fecha límite para su consumo.
Aunque en general, las enfermedades transmitidas por los alimentos son independientes de cualquier fecha de caducidad. La contaminación de otros agentes y las condiciones insalubres son la principal causa de enfermedades relacionadas con la alimentación:
• No lavarse bien las manos antes de preparar los alimentos.
• Almacenamiento de alimentos a la temperatura equivocada.
• Cocinar los alimentos a una temperatura inadecuada.
• La contaminación cruzada (carne cruda que entran en contacto con las ensaladas).
• Lavado inadecuado de los productos frescos.
Debemos además usar el sentido común para determinar si un alimento está en buen estado o no. El aroma, el gusto y la apariencia son fundamentales.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario